ATENCIÓN: Un espíritu engañador se ha desatado …


¡Ay de los que llaman a lo malo bueno y a lo bueno malo, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo! Isaías 5: 20

El libro de Gálatas 1: 8 nos habla claramente de que nos anunciarían un “evangelio diferente”, ¿de qué se trata esto? Muy simple, como el diablo sabe que no puede engañar a los creyentes para que vuelvan a lo que eran antes, intenta entonces otra estrategia, similar a la que utilizó en el Edén cuando le sugirió a Eva: “si comes esto tus ojos serán abiertos y serás como Dios sabiendo el bien y el mal” (Génesis 3: 5), en otras palabras “no es lo que te han enseñado, tienes que romper las estructuras para que puedas ver diferente, prueba algo nuevo, deja que tus ojos sean abiertos”. Esto resulta muy peligroso pues a través de estos argumentos se están promoviendo mentiras empaquetadas como “revelaciones espirituales” que no son más que mezclas de razonamientos humanos basados en espíritus de error. Veamos mejor, la palabra ENGAÑO significa “cerrar los ojos a la verdad por ser más grato el error”, muchos engaños dentro de las iglesias han comenzado a difundirse, engaños que llaman a naturalizar el pecado, engaños que condenan las bases doctrinales de la iglesia de Cristo, engaños en contra de la familia, engaños en contra de la santidad, engaños que llevan al libertinaje espiritual y a terminar incurriendo en pecado.

Quiero dejarte un ejemplo, hace unos meses tuvimos un encuentro con adolescentes y jóvenes, bajo el slogan “puedes pero no debes” hablamos de consagrar la sexualidad al Señor en guardarse para la persona que amaremos para toda la vida, como una ofrenda a Dios y a nuestro ser amado. En un momento uno de los chicos preguntó acerca de “cómo cuidarse si se mantenía relaciones” mi respuesta fue clara: “eso no lo hablamos con ustedes sino con parejas casadas”. Tal vez esto te suene un poco rígido pero no estamos de acuerdo en canjear nuestra santidad, sin la cual nadie verá a Dios, para congraciarnos con una sociedad perdida, consideramos que la juventud se está perdiendo por falta de límites, anhelan ver algo diferente. Hay un slogan o dicho popular que circula, y dice algo así: “Porque te quiero te cuido” Evitemos el Sida, esto es un ejemplo claro de “engaño”, deberíamos decirle a los chicos lo siguiente:   “Porque te amo, te respeto. Porque te amo, me guardo”. Aprendí esto en mi adolescencia, cuando inicié mis pasos de cristiana, y pude alcanzarlo, por lo cual hoy disfruto de una hermosa familia. Parece que olvidaron el sabio consejo siempre vigente de Pablo a Timoteo: “Huye de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor, y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor”. Y no porque el Sexo es malo, sino que el mejor tiempo y el mayor beneficio es tenerlo dentro del matrimonio y con una solo persona y para siempre, ya que trae muchos beneficios: seguridad, confianza, amor pleno, respeto y cuidado.    

 Otro de los engaños es acerca del “pacto matrimonial”, antes hablar de divorcio parecía una herejía dentro de la iglesia pero hoy todo lo contrario, parece haberse olvidado la advertencia de Jesús: “Por la dureza de vuestro corazón es permitido esto” (San Marcos 10: 5) y a su vez que en Hebreos 3: 8 se nos dice: “No endurezcáis vuestro corazón”, siendo la gracia de Dios el antídoto para no llegar a esto. Romper un pacto es algo serio, no podemos pasar por alto las maldiciones que traeremos sobre nuestras generaciones y sobre nosotros mismos, si la pareja pone en sus vidas, en primer lugar a Dios como el centro, guía y consejero no llegará a la ruptura; de lo contrario, ambos han fallado al Señor, a si mismos y a sus hijos. Amigos, probemos los espíritus, un espíritu de engaño se ha desatado dentro de las iglesias, el Reino de la verdad está confrontando al Reino de la mentira, “hombres buenos con mantos de luz” están difundiendo sus falsas ideas (2 Corintios 11: 14 y 15), aún los escogidos son confundidos por ellos (San Mateo 24: 24), no ignores sus maquinaciones (2 Corintios 2: 11). Tienes que estar atento a estas señales:
-        #  Sus enseñanzas disminuyen la autoridad de las Escrituras, recuerda que Jesús reprendió a Satanás en el desierto con la Palabra, por eso examina todo a la luz de la misma (San Mateo 4).
-        #  Sus enseñanzas distorsionan el mensaje divino porque añaden sus propios pensamientos, con tendencias políticas y  filosóficas, etc. No edifican al cuerpo de Cristo sino que traen disensión y confusión.
-       #   Moralizan el mensaje del evangelio trasladándolo a un nivel humano y social, sin arrepentimiento y nuevo nacimiento, sin un llamado a la  santidad, tratan el alma y dejan a un lado el espíritu. No hay presencia del Espíritu Santo como artífice de cambios.
-          #    Complican la simple y sencilla fe en Cristo con inventos humanos.

“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.” 1 Juan 4: 1

Por sus frutos los reconocerán. Nunca se recogen uvas de espinos o higos de cardos, ¿verdad? Así mismo, todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible; un árbol bueno no puede dar fruto inservible, ni puede un árbol podrido producir fruto excelente. Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego. Realmente, pues, por sus frutos reconocerán a aquellos hombres”. (San Mateo 7:15-20.)

Estamos en tiempos difíciles, muchas preguntas sin contestar, cambios radicales que movilizan a tomar posiciones estratégicas para permanecer firmes, invadidos de influencias demoníacas como no hubo antes,  hay un llamado de lo alto que nos dice: “He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos, sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas” (San Mateo 10: 16). Cuida tu vida espiritual, no te dejes llevar fácilmente, mantén la comunión con quién te ha llamado, lee y escudriña La Palabra, déjate guiar por tus líderes, pregunta a Dios por lo que no entiendes, examina la senda de tus pies…

“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad.” 1 Timoteo 4: 1

Mensaje de la Pastora Silvia Prado de Serantes - escrito en Septiembre 2011.-

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